Japón, paraíso del vending
Una cosa que básicamente todos los turistas que visitan Japón notan de inmediato es la gran cantidad de jidohanbaiki (自動販売機) o máquinas expendedoras que hay en todo el país. Están en cada estación, en cada edificio, prácticamente te toparás con una máquina expendedora sin importar a dónde vayas, incluso en el campo o en lugares donde apenas hay personas.
Hay muchas razones por las que hay máquinas expendedoras a lo largo de todo Japón. Después de preguntar a a Hachiyoh, una empresa con sede en Tokio responsable del mantenimiento de máquinas expendedoras, aquí te dejamos las 6 razones por las que hay tantas máquinas expendedoras en Japón.
1) Porque Japón es seguro
Hay muy poco vandalismo en Japón, por lo que incluso si se instala una máquina expendedora en un espacio público como un parque o en la acera, rara vez estará rota o descompuesta.
2) Porque la gente ocupada ama la comodidad
Japón es famoso por sus largas horas de trabajo y muchos de los habitantes de Tokio están acostumbrados a hacer muchas horas extra. El resultado de esto es menos tiempo, por supuesto, y, a veces, la gente está demasiado ocupada para ir a la tienda de conveniencia más cercana. ¡Entonces, no hay nada más conveniente que tomar una bebida rápida y sabrosa de una máquina expendedora en el camino! También las empresas, las academias o las universidades suelen tener maquinas expendedoras en sus instalaciones, tanto de bebidas como de comida caliente. En algunos lugares incluso se pueden llegar a encontrar maquinas expendedoras de Frutas, paraguas, ramen, pan enlatado, huevos, helado, flores, etc.
3) Porque todos pueden convertirse en propietarios de máquinas expendedoras
Esta razón no es ampliamente conocida, pero básicamente, todos los residentes permanentes pueden solicitar la creación de su propia máquina expendedora. Después de que la empresa de gestión apruebe la solicitud, pagarás una tarifa de instalación de diez mil de yenes (100 USD). Si el lugar que elegiste para tu máquina expendedora es bueno, ten por seguro que sera un negocio muy lucrativo y muchas personas lo han hecho como una especie de trabajo secundario.
4) Porque el mantenimiento es perfecto
Los botes de basura para botellas y latas se instalan directamente en la máquina expendedora o al lado, lo que proporciona a las personas un lugar para tirar sus bebidas vacías en un país que casi no cuenta con basureros públicos. Sin embargo, cuantas más máquinas expendedoras hay, más papeleras deben vaciarse. Las compañías especializadas de mantenimiento se aseguran de que no haya basura, reabastecen las máquinas regularmente y realizan todo tipo de tareas relacionadas con el mantenimiento. Es un sistema que funciona tan perfectamente, que será difícil encontrar una papelera llena o una maquina en mal funcionamiento, lo que hace que las máquinas expendedoras siempre estén funcionando incluso cuando ocurren desastres naturales como terremotos.
5) Porque incluso ahora, los precios se mantienen bajos
Desde 2017, los precios de las bebidas vendidas en las máquinas expendedoras siguen siendo sorprendentemente bajos, incluso en Tokio que tiene reputación de ser una ciudad muy cara(cosa que no lo es). El café cuesta 130 yenes, mientras que 500 ml de jugo o té verde cuestan apenas 160 yenes(en supermercados de barrio o ciertos konbinis se pueden encontrar las mismas bebidas aun más baratas). Hace algún tiempo, cada bebida podía obtenerse por una sola moneda, pero el aumento del impuesto al consumo ha provocado un aumento en los precios de las bebidas de las máquinas expendedoras. Sin embargo, sigue siendo un precio bastante razonable y asequible. Además una de las cosas que se ha mantenido estable es la conveniencia y la forma tan rápida que se obtiene los productos que podemos encontrar en dichas maquinas.
6) Máquinas útiles, que gastan poca energía y sirven en caso de desastre
En estas máquinas también se están desarrollando mecanismos de eficiencia energética que, por ejemplo, detienen el sistema de refrigeración cuando hay grandes picos de consumo eléctrico, o que calientan las bebidas a través de válvulas que aprovechan el calor que genera el sistema de refrigeración. De este modo, en los últimos 20 años se ha conseguido reducir el consumo energético anual por cada máquina expendedora en un 70%.
Por otra parte, en un país con tantos terremotos como Japón también están proliferando en las instalaciones públicas máquinas expendedoras adaptadas para los casos en los que haya desastres. Estas máquinas proveen bebidas de manera gratuita cuando hay cortes de electricidad tras una catástrofe natural, y últimamente también hay algunas que incluyen pantallas que ofrecen información de interés en caso de desastre.